La Estrella de Córdoba | Bendición del camarín de la Virgen
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Bendición del camarín de la Virgen

Bendición del camarín de la Virgen

El domingo 13 de marzo, antes de la finalización de la Función Principal de Instituto, en la acción de gracias, nuestro Director Espiritual procedió a bendecir la nueva decoración pictórica del interior del camarín, ofrendada como el joyero que nuevamente cobijó a Ntra. Sra. de la Estrella. Este trabajo es obra del afamado pintor retratista cordobés D. Rafael Cervantes Gallardo, que e nos honró con su visita y al que nuestro Hermano Mayor agradeció su trabajo con un obsequio en forma de cuadro de un fragmento de su obra. En la realización de estos trabajos también ha intervenido N.H.D. Miguel Ortiz Cabello, en la instalación y terminación de la decoración, al que la Hermandad agradece su desinteresada labor y disponibilidad permanente.

En la obra de Rafael Cervantes, de estilo realista, en la que destaca como retratista con magníficas obras, se denota la calidad técnica y la sensibilidad de sus trazos, obras reconocidas con multitud de premios y reconocimientos.

El altar efímero de estos días del Quinario había sido modificado para el día de la Función Principal, dándole menos altura al Señor con objeto de hacer partícipe a Nuestra Señora de esta Función Principal de Instituto desde el Altar Mayor que a partir de este día preside nuestra Parroquia, ante la sorpresa de los que esta mañana contemplaron la nueva estampa que presentaba nuestra titular mariana.

La composición del camarín, según palabras propias de su autor, se distribuye en siete piezas: cinco triángulos de la cúpula, una gran tira rectangular situada justo encima de la Virgen y un gran paisaje que ocupa toda la parte baja.

 

 

En la cúpula, nivel superior del camarín, se representa una alegoría del cielo y las tres piezas centrales las ocupa la Santísima Trinidad, en recuerdo al origen de la Hermandad, por un lado, y simbolizando que desde el cielo ilumina a la Virgen para ser la Madre del Salvador, completándose con dos ángeles que portan símbolos alusivos a la Virgen: lirios blancos y un espejo. Las cinco piezas se rematan con dos columnas, unos ángeles sosteniendo cortinajes y dos pares de cabezas de querubines. La franja superior la componen dos ángeles que sostienen una filacteria con la frase “Stella Matutina”, siendo la parte más íntima del camarín por ser la más oculta. En la parte inferior, que representa el nivel de la tierra se representa un paisaje, cercano a los seis metros de longitud, que está compuesto a la derecha por un atardecer desde la ribera cordobesa y en la izquierda, por una vista del alminar de San Juan de los Caballeros, donde fue bendecida Nuestra Señora de la Estrella, con dos parejas de querubines sobrevolando el cielo cordobés y portando las especies eucarísticas, en alusión al carácter sacramental de la Hermandad, y que están ascendiendo al cielo, intentando que toda la composición tenga unidad y esté bañada por un tono luminoso.

Toda la obra pictórica rebosa simbología mariana en un paisaje netamente cordobés que remarca la propia historia de nuestra Titular mariana así como la fundación de la corporación.